Viernes 03/06/2016
Por Víctor Herrera
Esta secuela de la versión de Tim Burton de Alicia en el País de las Maravillas (2010) trae como novedad tras cámaras a otro director. Esta vez es el británico James Bobin (The Muppets, 2011) el encargado de llevar a la gran pantalla el mundo de Lewis Carroll en esta nueva adaptación.
Antes de referirme a la cinta de este año, tengo que exponer brevemente mi apreciación de su antecesora (que en su momento desglosé en algún blog hoy inexistente). El mayor problema de la película de Disney de 2010 es que, más allá de reescribir la historia original (afortunadamente sin negarla, funcionando incluso como una secuela en sí misma), escaseaba en la ilogicidad de la misma y estaba impregnada de convención y de un intento soso de épica, que la convertían en un producto entretenido y colorido, pero desabrido. En ese sentido, incluso la cinta animada de 1951 (de la misma compañía Disney) se sentía más aventajada.
Esta continuación no es precisamente una oda a la ilogicidad de Carroll, pero Inframundo se expande ganando como espacio alucinante y cautivador. Y sobre todo, Alicia a Través del Espejo mantiene y potencia las cualidades de la cinta de hace seis años: el sentido del humor de algunos personajes, y en especial el espíritu feminista de la protagonista, antes insinuado, y ahora reafirmado.
El regreso de Alicia (Mia Wasikowska) a Inframundo para socorrer en una letal depresión al Sombrerero Loco (Johnny Depp), es el punto de inicio para presenciar un viaje más trepidante que el anterior. Con el Tiempo como personaje (Sacha Baron Cohen), como espacio físico y como fondo temático, el espectador asiste a un recorrido en el que descubre luces y fragilidades en ciertos villanos, así como algunas sombras en personajes fundamentalmente luminosos.
Por otro lado, la historia paralela que la protagonista vive en el mundo "real" tiene a sus partes en conflicto con mayor tensión que la vez anterior, y llega un punto en el que se vuelve casi tan interesante como la de "Wonderland". Por ello, es algo lamentable que tenga tan escaso tiempo en pantalla, ¿pero de qué otra forma podía ser si no dando cabida a la inferencia?
Por otro lado, la historia paralela que la protagonista vive en el mundo "real" tiene a sus partes en conflicto con mayor tensión que la vez anterior, y llega un punto en el que se vuelve casi tan interesante como la de "Wonderland". Por ello, es algo lamentable que tenga tan escaso tiempo en pantalla, ¿pero de qué otra forma podía ser si no dando cabida a la inferencia?
Consciente o inconscientemente, la película es fiel a su propio mensaje de aprender del pasado. Y es que Alicia a Través del Espejo supera en entretenimiento a su antecesora porque aporta más espesor a los personajes, pero también porque gana consistencia un mundo que antes rozaba la estética vacía. La cansina discusión sobre la fidelidad a la obra original es estéril y hasta cierto punto condescendiente con los admiradores puristas de las novelas de Carroll, pues ya ha quedado clarísimo que aquí hay apropiación de universo e inventiva de trama, y es evidente que el producto en sí funciona narrativamente más allá del gran desplante audiovisual.
Lo mejor: El océano del tiempo y todo el apartado de diseño.
Lo peor: La anticlimática canción de créditos de Pink diluye todo.
Calificación:
8
Título original: "Alice Through the Looking Glass" | Estados Unidos, 2016 | Dirección: James Bobin | Elenco: Mia Wasikowska, Johnny Depp, Helena Bonham Carter, Sacha Baron Cohen, Anne Hathaway, Rhys Ifans, Alan Rickman, Stephen Fry, Ed Speelers, entre otros. | Guion: Linda Woolverton | Producción: Tim Burton, Joe Roth, Suzanne Todd, Jennifer Todd | Música: Danny Elfman | Fotografía: Stuart Dryburgh | Edición: Andrew Weisblum | Diseño de Vestuario: Colleen Atwood | Diseño de Producción: Dan Hennah.
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